domingo, 29 de noviembre de 2015

1º DOMINGO DE ADVIENTO



"Mirad, vigilad: pues no sabéis cuando es el momento.
Es igual que un hombre que se fue de viaje y dejo su casa, y dio a cada uno de sus criados su tarea, encargando al portero que velara.
Velad entonces, pues no sabéis cuándo vendrá el dueño de la casa, si al atardecer, o a medianoche, o al canto del gallo, o al amanecer; no sea que venga inesperadamente y os encuentre dormidos.
Lo que os digo a vosotros lo digo a todos: !Velad!"


Sub tuum praesidium
confugimus,

Sancta Dei Genitrix.
Nostras deprecationes ne despicias
in necessitatibus nostris,
sed a periculis cunctis
libera nos semper,
Virgo gloriosa et benedicta.

jueves, 26 de noviembre de 2015

511º Aniversario del retorno al Padre de nuestra Ínclita Fundadora


Tal día como hoy, tras una larga y prospera  vida de entrega y sacrifico por Dios y las Españas, exhalo su último aliento, retornado al Eterno Padre, Nuestra Regia Fundadora y Hermana: Su Ínclita y Católica Majestad  Doña Isabel I de Castilla, Reina consorte de Aragón, Mallorca, Valencia, Sicilia y Condesa consorte de Barcelona y  Reina consorte de Nápoles.
Sin duda los rosaristas le debemos el haber fundado en Granada la devoción al Santo Rosario  y la Archicofradía que desde hace casi 525 años conserva intacto tan excelso legado.  
¡!Gracias Majestad!!      

De San Fernando viene tu corona,

que es venir de la sangre unida al Cielo,

y del Cid heredaste aquel anhelo

de alzar la Cruz donde la alfanje mora.
El don de imperio te entregó Castilla

y el Sacramento, de Aragón la estirpe,

Granada se rindió cuando fue en ristre

tu lanza que empuñaste allá en Sevilla.
Con el yugo y las flechas y la espada

–mi Señora Isabel, mi Reina Santa–

América te aguarda en el desierto.
Que otra vez hace falta una Cruzada

y bautizar al ídolo que espanta,

quemar las naves y avanzar resuelto.

sábado, 7 de noviembre de 2015

7 de Noviembre

V. El Ángel del Señor anunció a María. 
R. Y concibió por obra y gracia del Espíritu Santo. 
Dios te salve, María, Llena eres de...


V. He aquí la Esclava del Señor. 
R. Hágase en mí según tu palabra. 
Dios te salve, María, Llena eres de...


V. Y el Verbo se hizo carne. 
R. Y habitó entre nosotros. 
Dios te salve, María, Llena eres de...


V. Ruega por nosotros Santa Madre de Dios. 
R. Para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Nuestro Señor Jesucristo.


Oremos: 
Derramad, Señor, Vuestra Gracia sobre nosotros, que, por el anuncio del Ángel, hemos conocido la Encarnación de Vuestro Hijo, para que lleguemos, por su Pasión y su Cruz, a la Gloria de la Resurrección. Por Jesucristo, nuestro Señor.
R. Amén.





Mirad en sus brazos
está nuestro Dios
de su vientre fruto
Nuestro Redentor.
Difunto le llora
con cuánta aflicción
contando las llagas
que el hombre le abrió.
Sus pies y sus manos
taladrados vio
con los duros clavos
que humilde adoró.
Del amor herido
miró el Corazón
que nunca á los hombres
sus puertas cerró.
Y llora al mirarle
y su Corazón
de angustias mortales
cercado se vio.
Y al paso que llora
se aumenta su amor
hacia tantos hijos
que engendra en dolor.
Sus lágrimas tristes
por nosotros son
que somos los hijos
que Cristo le dio.
Oh Madre piadosa
Oh Madre de amor
tus ojos benignos
dirige hacia nos.
Si un hijo difunto
causa tu dolor
aquí ves mil hijos
que él te encomendó.



martes, 3 de noviembre de 2015

Adiós Glorioso Mes del Santísimo Rosario!

¡Salve Estrella de los mares!….. ¡Salve, salve, salve!
  
Rotundo se va expandiendo, como el humo del incienso, el ultimo acorde de la Salve Marinera, inundando con su solemne cadencia todos los rincones de la plaza. Poco a poco, en el culmen de la espadaña, inicia su volteo la más pequeña  de las campanas; solo tiene el deseo  de calmar su marcha y hacer que palpite más sereno el auge de la despedida.
De repente un destello se adueña de la explanada, estalla la palma real conmoviendo los corazones de los que están orando en la plaza. Levanta el paso al cielo, solo se oye el rechinar de treinta almas costaleras que la han paseado por Granada. Las esmeraldas de su corona han traspasado el dintel, la Reina de Santo Domingo ya pisa el suelo de su bendita casa. Y entonces el cornetín pica con maestría los primeros acordes de la Real marcha… Estallan los aplausos, los vivas, se llenan los ojos de lagrimas...

Y aquí es donde la imagen se difumina, todo empieza a tornarse borroso, Granada empieza a despertar de su dulce letargo, los rayos bañan sus ojos; entonces descubrimos que aún queda la espera, nos damos cuenta que este Octubre ha sido solo un sueño del que nunca hemos querido despertar; que todavía quedan muchas cuentas del  Santo Rosario que rezar al lado de Ella; de la Madre, de la Virgen, de la Patrona, de la Capitana y Reina:  Nuestra Señora del Rosario Coronada, que es venerada cada noche en el particular Octubre de nuestros sueños. 
Fotografía de La locura Cofrade 

lunes, 2 de noviembre de 2015

Requiescant in pace.

 
V. Ne recordéris peccáta mea, Dómine.
R. Dum véneris iudicáre sæculum per ignem.
V. Dírige, Dómine, Deus meus, in conspéctu tuo viam meam.
R. Dum véneris iudicáre sæculum per ignem.
V. Réquiem ætérnam dona eis, Dómine, et lux perpétua lúceat eis .
R. Dum véneris iudicáre sæculum per ignem.
Kyrie, eléison, Christe, eléison. Kyrie, eléison.
 
Pater noster...
 
V. A porta ínferi.
R. Erue, Dómine, ánimas eórum.
V. Requiescant in pace.
R. Amen.
 
V. Dómine, exáudi oratiónem meam.
R. Et clámor meus ad te véniat.
 
V. Dóminus vobíscum.
                  R. Et cum spíritu túo.
 
Orémus: Absólve, quæsumus, Dómine, ánimam fámuli tui N. (fámulæ tuæ N.) ab omni vínculo delictórum: ut, in resurrectiónis glória, ínter Sanctos et eléctos tuos resuscitata respíret. Per Chrístum Dóminum nostrum.
R. Amen.
 
V. Réquiem ætémam dona eis, Dómine.
R. Et lux perpétua lúceat eis.

V. Requiescant in pace.
R. Amen.
V. Animæ eórum et ánimæ ómnium fidélium defunctórum per misericórdiam Dei requiéscant in pace.
R. Amen.

domingo, 1 de noviembre de 2015

Rregina Sanctorum Omnium



"No le falta a María:
Ni la fe de los Patriarcas,
ni la esperanza de los Profetas,
ni el celo de los Apóstoles,
ni la constancia de los Mártires,
ni la templanza de los Confesores,
ni la pureza de las Vírgenes".

Si María es modelo de todas las virtudes, los Santos tuvieron en Ella un espejo en donde mirarse, un estímulo para superarse. Ella como Madre reprodujo todas las virtudes, que están al alcance de las personas. La ejemplaridad de María está en todos los órdenes y para todos los estados. Nos confirma esto el ejemplo de los Santos, quienes con el auxilio de María han llegado al grado de perfección del que en el cielo disfrutan.