Trescientos sesenta y cinco días Señora. Toda una eternidad para volver a Contemplaros sobre vuestro paso el 12 de Octubre, pero ya pasó el día soñado. Cada jornada que ha expirado, ha sido descubrir un Misterio más de la vida de Vuestro Hijo Jesús, un misterio tras otro con los que aprender a sobrellevar esta vida terrena llena de pruebas y sacrificios, pero también llena de buenos momentos en torno a los nuestros. En definitiva, una vida que no es nada sin el Dios uno y trino, que con sus favores nos permitió estar el pasado Viernes, bendito por siempre el 12 de Octubre, rindiendoos pleitesía una vez más en Vuestra Gloriosa Procesión.
Junto a vos, que sois Madre de todos los que se acogen a ese divino regalo Vuestro que es el Rosario, pudimos vivir un día de Fe y Devoción, unas horas llenas de momentos que ni un solo rosarista podrá olvidar.
Gracias, Vera Capitana y Marinera de Granada y el Realejo.
¡Viva Nuestra Señora del Rosario Coronada!
¡Viva la Copatrona de Granada!
¡Viva la Patrona del Realejo!
¡Viva la Vencedora de Lepanto!
¡Viva la Capitán General de la Armada!
¡Viva la Reina de Santo Domingo!
¡Viva el 12 de Octubre!
¡Viva la Madre de Dios!
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